martes, 15 de mayo de 2012

Mis problemas con ONO

Hace dos meses tuve la feliz idea de contratar con ONO el servicio de Internet+Televisión+Teléfono por 41,90 euros, una oferta que me resultaba atractiva, no solo económicamente sino por los servicios que ofrecía: 70 canales de televisión e ¡¡¡ INTERNET 30 Megas reales !!!!!. Era mi oportunidad de probar qué tal iba internet por cable. Además, era sin compromiso de permanencia, no tenía nada que perder, si no iba bien...me quitaba y listo. ¡ Ay jilón! mejor me podía haber puesto a probar a hacer música con cucharas.


 La cuestión es que lo contraté y  vino un técnico y empezó a meter cables por todos lados, abrir cajetines, hacer conexiones... 2 o 3 horas se tiró haciendo toda la instalación. Hablando con él me dijo que mi instalación era fácil, porque todo era moderno pero que en las casas antiguas ( mi casa tiene 10 años ) solían tenerlo muy complicado. ¡ 3 horas y mi instalación era fácil !...en fin...pensé... soy de los que tengo suerte.

Ufff, me estoy enrollando, voy a lo interesante. Me pongo a mirar los canales de televisión y algunos de ellos se veían bastante pixelados. Le pregunto al técnico ¿ esto es normal ?, y el me responde: Si, es que en las televisiones planas modernas ( TFT y LEDs ) se ve así. ¿ Modernas :S? Hasta que no lleguen los decodificadores nuevos a esta parte de España ( vivo en Granada ), esa es la calidad que hay. Han empezado a ponerlos en Madrid y Barcelona
¡ Pero si los menús de navegación parece que están hechos con el Paint !

¡Y algunas canales tienen más grano que mi primera cámara digital a ISO 1200 !
Bueno, no pasa nada, me autoconvenzo, ...si yo no veo la tele... si yo lo que utilizo es internet...

Vamos a probar la conexión. Configuro todas las wifis de los diferentes equipos ( 1 con Ubuntu, 1 con Windows 7)  1 Mac y un Windows XP por cable. Oye pues no va mal la cosa...
Tranquilos... no os aburráis, que ahora viene el momento dramático...
Pasado un mes el router empieza a reiniciarse continuamente y  de forma aleatoria. Y es cuando decido llamar al servicio técnico para ver qué pasa.

UPSSSS..... se me olvidaba una cosa importante... durante ese mes, en que ONO y yo tuvimos  nuestra particular luna de miel, me mandan un correo con 15 Megas más gratis por ser cliente de ONO. Yeeeepaaaa 15 megas más....sin pensarlo rellené un formulario y lo solicité.
SIN LEER LA LETRA PEQUEÑA ¡ FAIL !
Aceptando esos 15 megas de Judas también estaba aceptando un compromiso de permanencia por un año o penalización de 90 euros.

Total, retomamos lo del técnico, viene y empieza a revisar toda la intalación y "todo está perfecto". Se va.... vuelve a dejar de funcionar... y vuelvo a llamar y vienen un técnico....y lo mira y "todo está perfecto"...y se va.... y vuelve a dejar de funcionar.... Lo se, he entrado en un bucle infernal... se llama ONO.

Hasta aquí el resumen de mi viacrucis. Hoy he vuelto a llamar y después de pedirme por enésima vez mi DNI, mi teléfono de contacto, le número de avería ( cual de ellas ) y que les mande 50 etiquetas de anis del mono por correo certificado, me he decidido a escribir este blog para explicar todo el proceso y para servirme de Catarsis. Con alguien me tengo que desfogar. Porque descargar tu ira con los teleoperadores, además de ser poco ético, es como tirarle piedras a una pared de goma. Además, estas historias rocambolescas suelen ser duras de sufrir, pero muy graciosas para los demás... así que ya os iré contando el resto de estaciones de penitencia en sucesivas entradas...
Acabo de cambiar de opinión, definitivamente voy a apuntarme a un curso de tocar la batería para quitarme el stress.